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Cada día que comparto contigo,
es un día que agradezco a Dios
porque a pesar de la distancia que nos separa físicamente,
existe un lazo tan fuerte que hace... q
ue aunque el tiempo pase te sienta cada vez más
cerca de mí...
dentro de mi vida... muy profundo en el corazón...
Ya no sabría que
hacer si me faltaras...
tú formas parte de mi todo, estás en cada cosa
que hago,
en cada pensamiento, en cada sueño...
No existe una parte de mí que no te desee,
que no te extrañe, que no te busque...
Cada día que comparto
contigo es un día que agradezco a Dios ...
porque llegaste a mi lado y conquistaste mi corazón...
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Todo amor verdadero es comprometido
y todo compromiso implica esfuerzo.
No hay amor auténtico si no existe un compromiso voluntario
de cuidar y atender a la persona amada,
porque el amor es brindarse,
proyectarse juntos, ofrecer lo que se es y lo que se tiene.
En la ausencia me siento tan lejos de ti,
vienen a mi recuerdos de amor, recuerdos que nunca se olvidan, r
ecuerdos de lo que pudo ser y no fue
y surgen los reproches, arrepentimientos...
Pero, no hay rencor... porque sigo sintiendo amor,
te sigo amando.
Miro tus ojos y siento que me conquistas nuevamente,
me sumerjo en tus pupilas y vuelven los reproches, q
uiero encontrar respuestas, quiero satisfacer mis dudas,
quiero creer que fue lo mejor...
Pero, sigo en tu mirada y siento que apague una estrella q
ue nunca debía dejar de brillar,
pero me consuela saber que estoy contigo
y juntos seguiremos descubriendo el amor,
tal ves juremos amarnos siempre,
de repente juntemos nuestros corazones
y uniendo nuestras miradas acariciemos nuestros cuerpos,
para que sienta nuevamente entrar a un nuevo
amanecer y despertar con más amor.
En estos días quiero sentir que otra vez nace una ilusión,
sentir que brota nuevamente el amor,
que tus fuertes manos cubran mi piel, e
nfriando el ardiente deseo que hoy siento por ti,
deseo que este romance no termine jamás,
que nunca nadie pueda separarnos
y tener un porvenir con mucho, mucho tiempo... |
Yo sufro y tú lo sabes, sin embargo
me consuela pensar que tu me quieres,
pues todo lo compensa tu cariño y la dicha de amarte como
eres.
No imploro piedad… solo
te pido que nunca me abandones en la vida,
es tan dulce sufrir cuando se ama, sabiendo que tu amor cura la herida.
Nos separa el destino…
más no importa,
porque llegará el día en que
podamos mirarnos a los ojos como siempre,
sin tener que separarnos y juntaremos
nuestros labios
demostrando lo mucho que nos amamos.
No temas a quien quiera
separarnos,
haciendo que abandones este inmenso amor,
porque para borrarte
de mi alma tendrán que arrancarme el corazón. |
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